Vecina de Cristiano cuenta cómo es su vida en casa

La casa a la que se mudaron en Italia Cristiano Ronaldo y Georgina Rodríguez junto con sus hijos consta de dos villas conectadas y con dos entradas independientes, con una superficie de 805 m² sobre una parcela de 4.747 m², y todo ello ubicado en una de las zonas más exclusivas de Turín, en una colina cerca del centro de la ciudad. Un barrio elitista en el que viven varios jugadores de la Vecchia Signora, así como el presidente del club turinés y del grupo Fiat, Andrea Agnelli. Las vistas son espectaculares y la privacidad, máxima. Hasta ahora, inicia explicando el sitio web www.vanitatis.elconfidencial.com

Su vecina, Elizabeth ‘Betty’ Borel, hija de otro campeón de la Juventus en los años 30 y 40, Felice Borel, apodado Farfallino y fallecido en 1993, ha decidido comentar unas cuantas cosas sobre cómo es vivir al lado de la estrella del fútbol, «Cristiano es un vecino ideal”, dice Betty en declaraciones al ‘Corriere della Sera’. “Mucho silencio, sin fiestas. Nunca he visto pasar coches por nuestra carretera privada”, asegura.

“A menudo veo a Cristiano al volante de un Rolls-Royce. Lo vemos pasar todos los días, con cristales tintados. Pero en el garaje de su casa también tiene deportivos, como un Lotus. Además tiene una hermosa piscina cubierta. Y un jardín pequeño y bien cuidado con flores de colores”, continúa diciendo su vecina de villa.

Sobre los hijos de la popular pareja, asegura que ve “a Cristiano Junior a menudo deambulando con su monopatín, arriba y abajo de la calle que conduce a nuestras casas. También a Georgina seguida de una niñera que la ayuda con los carritos de bebé».

Betty tiene la impresión de que los niños viven en una “jaula de oro” y rápidamente se postula para buscarle amiguitos al hijo mayor del delantero portugués: “Tengo cuatro nietos para presentarle. Y además están los hijos y nietos de los otros vecinos, que tienen más o menos su edad”. (Nota cortesía de www.msn.com y www.vanitatis.elconfidencial.com)