Héctor Vargas habla de tráfico de influencias entre árbitros, Fenafuth y Liga Nacional

El técnico de Marathón, Héctor Vargas, le metió más leña al fuego con el tema arbitral y encima habla de tráfico de influencias entre los silbantes, la Federación Nacional de Fútbol y la Liga Nacional.

Vargas se refirió además a la apretada agenda que tiene su club en los próximos días.

“Se viene una semana dura, dos partidos ligueros complicados y luego Liga de Campeones de la Concacaf, debemos seguir por la misma línea para seguir peleando los primeros lugares, me gusta lo que he visto de mi equipo”.

Consultado sobre las altas calificaciones que otorga Pedro Rebollar, a los árbitros, pese a sus malos trabajos el sudamericano no se anduvo por las ramas.

“Está regalando puntos, él lo dijo en una capacitación que no iba cuestionar en situaciones difíciles y yo lo entiendo es como que mi equipo juegue mal y ustedes me pregunten si los futbolistas lo hicieron muy mal, si yo lo admito se me cae el club”.

“Defiende hasta lo indefendible por eso cae mal por ese tema, yo si me voy a sentar con él porque no soy mucho de aguantar, el penal sancionado por Melvin Matamoros, a favor de Motagua fue una equivocación grosera, no se puede equivocar así, hay que seguir mejorando, pero señalando los errores, es como tener un problema grave de salud y querer curarse con aspirinas, se deben tomar decisiones drásticas”.

“Lo de Motagua es reiterativo, en la final contra el España hubo dos penales claros a favor de los sampedranos y no los sancionaron, decir que los jueces tienen de 7 puntos para arriba es querer tapar el sol con un dedo”.

“Hay presiones en algún sentido, sino cómo explicar que Armando Castro, dirigió un Guatemala – Argentina, con Messi en el campo es porque alguien lo puso ahí, por pagar favores te mandan a dirigir un partido que no podes dirigir, Castro dirigiendo ese partido estando Matamoros y Oscar Moncada, algo raro”.

“Deben estar relacionados con alguien que tenga un puesto en la Fenafuth o la Liga Nacional, que está pidiendo favores y después los paga de otra manera, el tráfico de influencias está en todos lados”.

“Uno no puede comprobar nada porque no hay pruebas, pero hay cosas que son evidentes. Rebollar, fue asistente nunca estuvo acostumbrado a tomar decisiones, no es lo mismo el asistente que el entrenador, es el mismo caso, él siempre va por la tangente, ese cargo debería tenerlo un árbitro central”.