Aguirre, un técnico de segundas partes, es la clave de México

JOHANNESBURGO, (AFP) – El director técnico Javier ‘Vasco’ Aguirre, y su personal filosofía de que «segundas partes sí son buenas», es la clave de la selección de México para marcar un hito histórico en la Copa del Mundo de Sudáfrica-2010, que se disputa del 11 de junio al 11 de julio.

Aguirre ha demostrado saber aprovechar bien las segundas oportunidades. Lo hizo primero en 1986 en la Liga Española, con el Osasuna de Pamplona, donde vio fracasar un primer intento como jugador al sufrir una seria lesión, y regresó 16 años después para triunfar como técnico.

Y repitió su toque mágico con el Tricolor mexicano, al rescatarlo dos veces de las turbulentas aguas de las eliminatorias mundialistas, para llevarlo a las citas de Japón/Corea del Sur-2002 y Sudáfrica-2010.

Hijo de inmigrantes españoles radicados en México, Aguirre es producto genuino del fútbol de su país. Jugador de garra y entrega cuando militaba en los clubes América, Atlante y Guadalajara, exige esas mismas cualidades a sus dirigidos.

Nacido el 1 de diciembre de 1958, en el distrito federal de México, debutó en el fútbol profesional como centrocampista del América, en la temporada 1978-1979. Como joven valor, integró la selección nacional Universitaria que ganó la medalla de oro en la Universiada Mundial de 1979.

Su actuación en el campeonato local le abrió las puertas a la selección mayor, con la que jugó 60 partidos, destacando el Mundial de 1986 realizado en México, donde fue sexto.

Después del Mundial, fue fichado por el Osasuna, donde jugó poco debido a una fractura de la tibia y el peroné derechos, por lo que regresó a México, y tras su rehabilitación, pasó a jugar con las Chivas del Guadalajara.

Por su condición de líder, aún sin haberse retirado del todo, fue llamado por el entrenador Miguel Mejía Barón para que trabajara de auxiliar técnico con la selección azteca en el Mundial de Estados Unidos-1994. Su debut como DT lo hizo a fines de 1995, con los Potros del Atlante, de México, al que salvó del descenso.

Enamorado de su nueva profesión, en 1996 se mudó a España decidido a calificarse como Director Técnico de fútbol. Dos años después se graduaba, y en 1999 debutaba por la puerta grande llevando al Pachuca al Campeonato del Torneo de Invierno.

En el 2001 llegó por primera vez al rescate del seleccionado de México, que estaba a punto se ser eliminado en las eliminatorias de Concacaf para el Mundial de 2002.

Tras el llamado ‘Aztecazo’, cuando Costa Rica le ganó a México un partido eliminatorio en el estadio Azteca, Aguirre fue nombrado en reemplazo de Enrique Meza. Ya en la cita asiática, el Tricolor pasó facil la primera ronda, pero cayó 2-0 frente a Estados Unidos en octavos de final.

Terminada la aventura mundialista ficha para dirigir el Osasuna, donde en cuatro años consiguió estabilizar al equipo en Primera División, llevándole además a la final de la Copa del Rey.

Su palmarés le abrió las puertas del Atlético de Madrid para la temporada 2006-2007, donde también obtuvo logros como el título de la Copa Intertoto (2007) y llevó al equipo a los dieciseisavos de final de la Copa UEFA, tras siete años de ausencia en competiciones europeas.

Pero una mala racha de resultados en la liga española durante la campaña de 2009, puso fin a su relación con los ‘colchoneros’ madrileños. De nuevo salió al rescate del Tricolor, y el 16 de abril de 2009 asumió el cargo de DT, con el objetivo de tratar de clasificar para Sudáfrica-2010.

Aguirre logró poner en la misma frecuencia a jóvenes como los hermanos Giovanni y Jonathan Dos Santos, y Javier Hernández, con veteranos de la talla de Cuauhtémoc Blanco y Rafael Márquez, y logró el pasaje mundialista, llevándose de paso en el camino la Copa Oro del 2009.

En el Mundial, México compartirá el Grupo A con el anfitrión Sudáfrica, Francia y Uruguay. «Voy a ir permeando en sus cabecitas que el Mundial es la máxima justa a la que pueden aspirar y que no tenemos miedo a nada», subraya.