VÍDEO: Messi muestra a Argentina el camino para acabar con 23 años de sequía

Lionel Messi, que se erigió en figura de la Copa América con los tres goles marcados ante Panamá en menos de media hora, enseñó a Argentina cuál es el camino para acabar con la sequía de títulos que acucia a la selección desde 1993.
La estelar reaparición de Messi, que se había perdido el primer partido del torneo -un triunfo ante Chile (2-1)- por molestias en la espalda, dejó este viernes boquiabiertos a los cerca de 53.000 espectadores que acudieron al Soldier Field de Chicago.
Allí mostró cual puede ser el camino a seguir para poner punto final a la amarga ausencia de grandes títulos para la selección argentina, que se prolonga veintitrés años.
Arropado por sus compañeros, la estrella del Barcelona marcó tres de los cinco goles de ‘La Albiceleste’ y se desató en su mejor versión, la del talento en estado puro que le convierte en imparable para cualquier estrategia rival.
Ya lo había avisado en la víspera el técnico de Panamá, Hernán Darío ‘Bolillo’ Gómez: «Si Messi está inspirado, no hay nada que hacer». Dicho y hecho.
La rocosa y a veces demasiado fogosa Panamá ponía en algún aprieto a la indulgente Argentina, que vencía 1-0 desde el minuto 7 y que jugaba con un jugador más desde el 30, beneficiado por la expulsión del medio panameño Aníbal Godoy.
A la hora juego, Messi abrillantó el partido. Fueron tres goles, prácticamente uno cada diez minutos. En el 68, en el 78 (soberbio libre directo) y en el 87. Y eso que no estaba físicamente al cien por cien.
«Venía de estar parado por el dolor, no me siento al cien por cien y lo más normal es empezar de a poquito», aseveró ‘La Pulga’ al término del partido.
Messi ha estado recuperándose en los últimos días de un fuerte golpe en la zona lumbar que se produjo el 27 de mayo en un amistoso ante la selección de Honduras.
Solo jugó media hora este viernes tras la decisión del seleccionador Gerardo Martino, que quiere resguardarle para las rondas siguientes de la competencia.
La goleada a Panamá ha situado a Argentina, doble campeona del mundo (1978 y 1986), en la ruta de los cuartos de final, en los que se medirá al segundo clasificado del Grupo C, que probablemente será Venezuela.
«Venimos de jugar dos finales seguidas y ésta es una linda oportunidad para que se nos dé», corroboró Messi, que el día 24 cumple 29 años.
El cinco veces ganador del Balón de Oro y vencedor de todos los títulos con el Barcelona aún no levantó una Copa América o un Mundial con Argentina.
Ha jugado tres finales (dos de Copa América -2007 y 2015- y la del Mundial del 2014) y las ha perdido las tres.
Devorador de récords, está ahora cerca de batir el de Gabriel Omar Batistuta como máximo anotador argentino.
Las tres dianas del viernes sitúa a Messi con 53 aciertos, una menos que el legendario delantero de la Fiorentina, que ha anotado 54.
«Para mí es un placer, un orgullo estar cerca del Bati, pero es lo de menos. Lo que pretendemos es otra cosa», respondió el jugador del Barcelona cuando fue cuestionado por el registro que está cerca de batir y que llegará si marca un gol el martes ante Bolivia en Seattle.
La acogida de Chicago, la ciudad del mítico Michael Jordan, a Messi ha sido notable.
En el Soldier Field, hubo muchos niños estadounidenses con la zamarra del ’10’ y la prensa le ha dedicado bastante atención.
El prestigioso ‘Chicago Tribune’ destacó hoy la actuación de ‘La Pulga’ en un friso de primera página: «Messi reparte magia desde el banquillo». EFE