catrachos imponen su ambiente en Curitiba

El estadio Arena da Baixada comienza a llenarse de aficionados hondureños y ecuatorianos, que esperan que su selección nacional se lleve los tres en la fría noche de la ciudad de Curitiba.

Pero ni ese gélido clima ni la distancia o el propio desconocimiento de la ciudad, ha evitado que la fanaticada catracha se haga presenta una vez más para apoyar a su selección, tal y como ha sucedido en las últimos años.
Se esperan alrededor de 4 mil hondureños a la hora del partido, un número inferior en relación a la cantidad de ecuatorianos que ya compraron entrada y que se calcula serán entre 7 y 8 mil.
Como suele acontecer en cada uno de los juegos que involucra a la selección nacional de Honduras, la afición ha tenido un comportamiento impecable y, lejos de buscar problemas, han fraternizado con los ecuatorianos.