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De Todo Un Poco

Embolo, el indomable león suizo que enfrentará Brasil

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Aunque nació en Camerún, Breel Embolo creció en Suiza y cuenta a la AFP por qué eligió a la ‘Nati’ por delante de los ‘Leones Indomables’, antes de su derbi personal -en un grupo G del Mundial-2022 donde también figura Brasil- el jueves en Doha.

«Si marco intentaré no celebrar. Pero el fútbol es un deporte de emociones. Si lo celebro no será contra mi país natal, sino porque quiero ganar», explica el delantero centro del Mónaco (25 años), una de las figuras del Suiza-Camerún que se disputará en el estadio Al Janoub.

«Es un partido muy, muy especial para mí y para toda mi familia. Porque es un poco como un conflicto. Habrá mucha emoción a lo largo de este duelo», añade.

En el sorteo «no salté de alegría», reconoce. «Pero a la vez estaba orgulloso de poder jugar contra mi otro país y enseñar lo que había aprendido».

Embolo explotó en la escuela del fútbol helvético. Llegado a Suiza a los 4 años con su madre y su hermano (los padres estaban separados), entró a los 13 años en el Basilea y no tardó en empezar a jugar en las categorías inferiores de la selección roja.

 

– «Raíces» –

Pero todavía no contaba con la nacionalidad suiza y los ‘Leones’ le sondearon cuando tenía 17 años.

«Tuve la posibilidad de ir al Mundial con Camerún en 2014, con el seleccionador Volker Finke», recuerda Embolo.

«Nunca rompí el vínculo con Camerún y venía de disputar solo tres o cuatro partidos con el Basilea», añade el atacante que también pasó por el Schalke 04 y el Borussia Mönchengladbach.

«Me pensé mucho mi decisión», admite. Fue «muy difícil. Y de repente, un día te despiertas, tienes tus respuestas y te dices: ‘Esto es lo que quiero. No hay vuelta atrás’. En mi familia había partidarios de las dos selecciones. Pero todos respetaron mi decisión».

Camerún sigue corriendo por sus venas. «Toda mi familia vive allá. Para conservar este vínculo voy una o dos veces al año», explica Embolo. «Quiero que mis hijos también conserven estas raíces. Y también quiero retribuir a través de ciertas organizaciones benéficas, en particular mi asociación».

El futbolista va «a menudo de vacaciones a Yaundé y Duala», donde recarga energías. «Mi padre todavía vive allá. Así que nos sumergimos por completo y me sienta muy bien».

– Cántico a su nombre –

Embolo también está muy cómodo en Suiza, donde es muy popular.

«Tiene esta capacidad de hablarle a toda Suiza», explica el periodista del Temps, Lionel Pittet. «Un camerunés francófono que creció en la Suiza germanófona, habla perfectamente francés y alemán. Casi nadie excepto (la esquiadora Lara) Gut-Behrami o (Roger) Federer entre los deportistas de primer nivel de Suiza puede responder a todo el mundo en su idioma. Para ser una estrella del deporte a escala nacional es importante», analiza.

Con una personalidad sonriente, Embolo habla de buena gana y es socarrón.

Símbolo innegable de popularidad, es el único que cuenta con una canción de los hinchas helvéticos a su nombre.

«En la ‘Nati’, en la selección, Breel está como en casa», dice el cántico.

A nivel deportivo, ha resuelto por fin su problema en la alineación en la selección, gracias a su buen hacer como ariete en Mónaco.

Anteriormente su demarcación variaba, ya que el puesto de delantero centro era para Haris Seferovic. Embolo se desempeñaba en la banda, como delantero de apoyo o en el banco.

Pero ahora está en plena forma con el Mónaco (8 goles en 23 partidos) y Seferovic pasa un poco desapercibido en el Galatasaray, donde apenas juega (10 encuentros) y solo ha marcado dos goles, contra equipos de divisiones inferiores en la Copa de Turquía.

De momento Embolo le ha quitado el puesto y el ‘Leon’ no tiene miedo de sus hermanos cameruneses, sean o no ‘Indomables’. AFP

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