Debe prevalecer carácter de “Primi”

El entrenador hondureño Ramón Enrique Maradiaga, ahora seleccionador de El Salvador, enfrenta serio problemas con el equipo nacional de ese país, debido a la huelga de los jugadores, pero es el momento para que “Primitivo” saque a flote su carácter para cumplir con su plan de trabajo.
A dos semanas del debut ante México, en la eliminatoria para el Mundial de Rusia 2018, el paro de “tacos caídos” persiste y la única opción que tiene el catracho es llamar a futbolistas que deseen estar en la selección.
Cuando el amor al país se cambia por unos cuantos dólares no vale la pena contar jugadores de ese tipo, y ojalá que los hondureños no puedan copiar la mala imagen que están dejando los jugadores cuscatlecos, porque antes algunos querían hacer lo mismo.
Pongo de ejemplo a los deportistas de las demás disciplinas que se llenan de orgullo ganar una medalla en representación de nuestros países y no piden dinero a cambio. Qué pena que Maradiaga tenga que lidiar con situaciones complicadas.
El estratega ha cambiado de idea “mi plan era poner un bus en la portería contra México. Ahora el plan cambia y será poner el tráiler”. En un país donde no hay de dónde sacar mucho futbolista la situación se torna gris para un entrenador.
Este es un claro ejemplo para las autoridades de nuestro balompié que cuando un jugador ponga trabas para estar integrar la selección nacional por aspecto monetario no debe ser tomado en cuenta, ya que los perdedores son los propios futbolistas, la representación del país es la principal vitrina para mostrarse al mundo y así tener la oportunidad de jugar en el exterior.
Por Rodolfo Herrera