«Piojo» Herrera no se rinde frente a la adversidad

A pocas horas del decisivo encuentro de cuartos de final ante Estados Unidos, el seleccionador nacional Miguel Herrera dejó claro que Costa Rica no se escuda en las bajas y que, pese a las dificultades, el equipo llega con convicción y energía.

“La convocatoria fue de 26 por una razón, hoy tenemos 21 y todos están comprometidos. Ha sido difícil, sí, pero el grupo está fuerte, sólido, trabajando bien en el sistema”, afirmó este sábado en conferencia de prensa.

Sobre la alineación para este domingo a las 5:00 p. m., el estratega fue prudente, aunque deslizó un mensaje de respaldo a los más jóvenes del plantel. “No voy a dar nombres, pero estos muchachos me demuestran cada día que están listos. Es su momento, este partido es clave para ellos”, dijo con énfasis.

Herrera también se refirió a lo que significaría alcanzar una hipotética final. Aunque aclaró que no importa el rival, aceptó que enfrentarse a México tendría un significado especial. “Sería un sueño estar en la final con estos chicos, con el rival que sea. Si es México, claro que sería algo muy lindo”, expresó.

El técnico valoró de forma positiva el rendimiento de su equipo a lo largo del torneo, y pidió que no se subestime lo logrado hasta ahora. “Cada partido ha sido una historia distinta. Estos chamacos han levantado la mano. Lo de 2014 fue importante, pero hoy tenemos que escribir algo diferente. Este grupo puede hacerlo”.

En cuanto a la organización de la Copa Oro, Herrera fue diplomático pero directo: “Los estadios son de primer nivel. Cuando llegamos había una cancha que no estaba bien, pero rápidamente nos pasaron a instalaciones espectaculares. Claro que siempre se puede mejorar, pero todo ha estado bien”.

Sobre el uso del VAR, lo valoró como un recurso útil, aunque aclaró que en su caso no alteró demasiado el rumbo del torneo. “Es una herramienta que ayuda, especialmente a los árbitros. Es bueno que se utilice”.

Finalmente, recordó su primer enfrentamiento ante Estados Unidos, en un amistoso en el que se estrenó como técnico del combinado nacional. “La directiva me dijo que podía verlo desde el palco, pero si vine fue a trabajar. Me apoyé en Paulo Wanchope y asumí la responsabilidad desde el inicio”, rememoró.

Con cinco jugadores menos —tres por lesión y dos por suspensión—, el panorama no es ideal, pero Herrera mantiene la esperanza: “Sabemos que el rival es fuerte, pero nosotros también tenemos con qué competir. El grupo quiere cambiar la historia”. (ESPNDEPORTES)