El nuevo técnico de Paraguay, Gustavo Alfaro, fue elevado a los altares por los aficionados de la Albirroja con el triunfo 1-0 el martes sobre Brasil por la octava fecha del clasificatorio sudamericano para el Mundial 2026.
El DT argentino, ex seleccionador de Ecuador y Costa Rica, terminó de desempolvar y de sacar las últimas telarañas que envolvieron al conjunto guaraní en 14 años de sequía desde que abandonó la posta su compatriota, Gerardo «Tata» Martino en 2011.
Los 13 pases consecutivos entre sus jugadores en un pasaje del segundo tiempo que demostraron seguridad, saludados con el típico «olé» de los 40.000 espectadores, representaron la prueba del retorno de la confianza en el combinado.
Sus mejores momentos habían quedado sepultados en Sudáfrica 2010 que llegaron a ubicar a Paraguay octavo en el ránking FIFA.
Pero luego comenzó un prolongado ostracismo que sacrificó 10 entrenadores en su mayoría extranjeros.
Pasaron entre otros Ramón Díaz, Gerardo Pelusso, Juan Carlos Osorio, Eduardo Berizzo, Guillermo Barros Schelotto y Francisco ‘Chiqui’ Arce.
Con el undécimo que recaló oficialmente el 16 de agosto Alfaro, renació el sueño de tocar el cielo con un semillero abundante pero con el ADN perdido como reconoció el DT.
– «Todavía no vi» al mejor Paraguay –
«Yo no vine a dirigir lo que ustedes son, vine a dirigir los jugadores que pueden llegar a ser la mejor versión de ustedes que todavía no la vi y la quiero ver en la Copa del Mundo», dijo Alfaro en su arenga a los jugadores.
Validó además el trabajo hecho por sus antecesores.
Los especialistas se sorprendieron cuando Alfaro puso como lateral derecho a Juan Cáceres (Lanús de Argentina) en sustitución del veterano Gustavo Velázquez (Newell’s).
«Cáceres era el único que podía alcanzar en velocidad a Vinicius». La estrategia funcionó. Aunque se filtró peligrosamente en varios pasajes del partido, en el balance, Vini Jr quedó virtualmente anulado.
Su colega Dorival Junior coincidió al admitir que la Canarinha jugó un primer tiempo para el olvido remontándose a la poca efectividad del tridente «madridista» que mandó al campo de juego, que completaron Rodrygo y el juvenil Endrick.
Este último fue incluso sustituido en el descanso por Luiz Enrique quien estaba en los planes previos.
En la segunda etapa, además de un mano a mano de Rodrygo con el portero Roberto «Gatito» Fernández que tiró arriba, el once verdeamarillo no produjo jugadas de extremo peligro.
– Alfaro y su sicólogo a cuestas –
Mientras tanto, con su sicólogo al lado para motivar a sus jugadores, el entrenador de Paraguay ya anunció su ida anticipada el 6 de octubre a Quito para preparar el partido que enfrentará a sus ex pupilos del «Tri» con la consigna de «vamos al Mundial».
Ecuador primero y Venezuela después en Asunción son para Alfaro de alta prioridad «porque son nuestros rivales directos».
El adiestrador se dedica entretanto a eliminar las arañas que tejen las telarañas del cuadro albirrojo «porque allá en el fondo están los frutos», expresó el DT.