Después de no triunfar con el Manchester United y de ver alejarse la selección inglesa, Jadon Sancho regresa a su país con el Borussia Dortmund para disputar la final de la Liga de Campeones, el sábado en Londres ante el Real Madrid.
El estadio de Wembley fue el lugar en el que Sancho vivió además una noche traumática cuando Inglaterra dejó escapar el título en la Eurocopa en la tanda de penales contra Italia.
En cuatro meses, de principios de enero a principios de mayo, Sancho pasó del ninguneo en el Manchester United, donde ya no jugaba, a brillar en la semifinal que el Dortmund ganó al París Saint-Germain, ganándose así con sus compañeros el boleto para la capital británica.
«San-sational!», se entusiasmó el tabloide The Sun después del espectacular partido de Sancho en el Westfalenstadion, en la ida de esa semifinal ante el PSG, donde los alemanes ganaron 1-0.
«Ensombreció al mejor jugador del mundo, Kylian Mbappé. Se mostró más en forma, más inspirado y más seguro de sí mismo», analizó el exinternacional inglés Owen Hargreaves, ahora comentarista en la televisión.
El atacante formado en su etapa juvenil hasta 2017 en el Manchester City sueña ahora con poder ganarse elogios similares con su actuación ante el Real Madrid en el césped de un lugar especial para todo futbolista inglés, Wembley.
– El trauma de la Eurocopa –
Fue en ese templo donde Sancho fue titular por primera vez con Inglaterra, en su segundo partido como internacional. Fue el 15 de noviembre de 2018 contra Estados Unidos (3-0) y destacó con una asistencia a sus entonces 18 años.
Mucho peores son los recuerdos que tiene de otra noche en Wembley, la del 11 de julio de 2021.
Era su partido número 22 con Inglaterra y el seleccionador Gareth Southgate le hizo entrar en el tercer minuto del descuento de la prórroga de la final de la Eurocopa contra Italia. Tenía 21 años y se le encomendaba una misión de responsabilidad: uno de los lanzamientos de la tanda de penales que iba a decidir el ganador del trofeo.
Cuando Italia dominaba 3-2 en esa tanda, Sancho vio cómo su tiro era rechazado por el arquero Gianluigi Donnarumma.
El italobrasileño Jorginho falló a continuación y fue otro joven inglés, Bukayo Saka, el que erró a continuación. El sueño de Inglaterra de ganar el título en casa y lograr su primer trofeo desde el Mundial de 1966 saltaba por los aires.
Para Sancho, aquella noche marcó el inicio de una evolución en línea descendente en su carrera.
– Decepción en Old Trafford –
Días más tarde de la final se unía al Manchester United, pero de la ilusión inicial pronto se pasó a la sensación de fiasco. El jugador londinense se vio viendo relegado, hasta que dejó de entrar por completo en los planes de Erik Ten Hag en el inicio de la temporada 2023-2024.
El técnico neerlandés le reprochaba un rendimiento insuficiente en los entrenamientos y Sancho se defendió de las acusaciones, considerándose un chivo expiatorio, lo que provocó que quedara apartado del equipo.
El Borussia Dortmund acudió al rescate en el mercado del último enero, con una cesión que pareció venir bien a todos.
Había sido con la camiseta del equipo amarillo donde Sancho había eclosionado en la élite en una primera etapa de 2017 a 2021, con unos cincuenta goles y otras tantas asistencias.
Fue ganando protagonismo con partidos cada vez mejores, primero en Eindhoven en la ida de octavos de esta Champions, luego en Madrid en la ida de los cuartos. Y en la Bundesliga brilló también ante el RB Leipzig, con un magnífico gol que sin embargo no evitó la derrota de los suyos por 4-1.
Sus partidos de los últimos meses no le han abierto las puertas de la selección, en un puesto donde tiene una enorme competencia.
Pero Sancho tiene además en el aire su futuro, por lo que reivindicarse en el partido más importante del fútbol europeo sería perfecto: está cedido en Dortmund sin opción de compra hasta el 30 de junio.
