Antonio Tiberi, la redención del «asesino del gato»

Caído en desgracia por haber matado al gato de un ministro con una carabina de aire comprimido, Antonio Tiberi prosigue su rehabilitación pública en el Giro de Italia, donde marcha disparado en la clasificación de los jóvenes.

El corredor italiano de 22 años sube a la ceremonia del podio día tras día para vestirse con el maillot blanco de mejor joven del Giro de Italia, en el que además ocupa el 5º puesto en la general.

Pero el recorrido de este joven prodigio de Frosinone, al sudeste de Roma, vivió un serio golpe cuando fue condenado en 2023 a una multa de 4.000 euros (algo más de 4.300 dólares) por haber dado muerte con una carabina de aire comprimido al gato del ministro de turismo de San Marino, el pequeño estado en el que reside.

Tiberi no tardó en disculparse, reconoció que su comportamiento fue «estúpido e irresponsable» y aseguró que no fue su intención matar al felino.

Pero el daño estaba hecho. Y las redes sociales lo amplificaron. Su equipo Trek-Segafredo rescindió su contrato. En un momento, Antonio Tiberi pasó de ser ‘el Principito’ del ciclismo italiano a un apestado.

Un año después, ha renacido de sus cenizas. En su primer Giro domina ampliamente la carrera en su categoría con su nueva formación, Bahrain Victorious, donde encontró refugio para tratar de convertirse en «un mejor ciclista y un hombre mejor».

– Alabanzas de Pogacar –
De momento cuenta con los halagos de los más grandes. «Es el único en haber demostrado que tenía ‘pelotas’. Es super fuerte», dijo de él Tadej Pogacar al término de la octava etapa, en la que Tiberi fue el único que osó atacar al ogro esloveno en el Prati di Tivo.

En Italia, un país falto de campeones desde la retirada de Vincenzo Nibali, ganador del Tour de Francia en 2014, los aficionados ya han comenzado a soñar.

Con su silueta longilínea (1,82 m, 62 kilos), sus pelo castaño, su sonrisa encantadora y su temperamento ambicioso, el joven Antonio recuerda en el imaginario colectivo al ‘Tiburón de Messina’.

Incluso Tiberi se afirma como un mejor rodador que Nibali. Campeón del mundo contrarreloj junior en 2019 a pesar de sufrir una avería en un plato, Tiberi terminó las dos cronos del Giro en una meritoria sexta posición, lo que abre para él buenas perspectivas de cara a la general en grandes vueltas.

Porque también se desenvuelve bien en montaña, como demostró el domingo en la etapa reina, en la que reconoce haber pasado «el día más difícil» de su vida «en una bicicleta», pero en la que se aferró al asfalto para salvar su maillot blanco.

– Limpiar su imagen –
«Espero defenderlo en la última semana», sentencia el italiano, que se halla a casi nueve minutos y medio del insaciable Pogacar y que conserva 19 segundos de ventaja sobre el sexto, el neerlandés Thymen Arensman, también en liza por el título de mejor joven.

El objetivo último, aunque se presenta complicado, es subir al podio en Roma, lo que supondría el primer podio para un italiano en el Giro desde la segunda plaza tres años atrás de Damiano Caruso, quien le apoya en el Bahrain.

Pero mientras tanto, Tiberi trata de limpiar su imagen. Todas las mañanas durante la salida ficticia se coloca a la altura del vehículo de dirección de carrera para buscar un dulce, una imagen simpática para las cámaras.

También adoptó a un perro callejero que nombró Pluto y que desde entonces es su compañero más fiel.

Aun así algunos silbidos acompañan todavía sus apariciones en el podio protocolario. Pero Tiberi espera que sus resultados vayan arrinconando cada vez más en su biografía aquel episodio de «comportamiento vergonzoso» contra un gato del ministro de San Marino.