Nahúm Espinoza: «Olimpia no me debe, ni le debo»

Tras varios meses de incapacidad y luego de superar algunas afecciones cardíacas, el ex futbolista y entrenador  Nahúm Espinoza , ahora en proceso de recuperación, expuso algunas situaciones que atravesó durante la experiencia y se vio obligado a separarse del club Victoria el pasado mes marzo del presente año.

En entrevista brindada a Deportes TVC, el entrenador de 58 años, no contuvo sus lágrimas al señalar algunas situaciones que experimenta durante su enfermedad, algo que a su juicio, lo ha ayudado a mejorar como persona.

Hay que destacar que Espinoza llegó a la ciudad de La Ceiba a finales de marzo para ser presentado como director técnico del club Victoria en lugar del argentino Héctor Vargas; pero durante su primer entrenamiento recayó y fue trasladado de emergencia a la capital, instancia para la que estuvo varios días en cuidados intensivos, debido a algunas afecciones cardíacas que todavía lo mantienen en proceso de recuperación.

«Son tiempos difíciles voy saliendo de esta operación, no me lo esperaba pero Dios me la puso en mi camino, esto me ayudo a mejorar como ser humano, siempre fui consiente que era una enfermedad de no retorno, nunca creí  que mi corazón estuviera tan mal, quise volver a dirigir y fue imposible, fue sorpresa total no me morí porque Dios tenía un plan para mí»

«Ahora me toca recordar y contar mi experiencia, recuerdo que ingresé a emergencia y al ver mi estado le cambio el  rostro al cardiólogo, me remitió inmediatamente al Hospital El Tórax , ahí se arruino la máquina, no me podían intervenir y me fui al Seguro Social, es una lastima lo que viven los enfermos en los hospitales de Honduras»

«Por esas cosas de la vida, Dios me puso un amigo, sin embargo le dije que no tenía dinero para irme a los Estados Unidos,  pero y resulta que el doctor Somoza de San Pedro Sula  me ayudó y me dijo la verdad acerca del diagnóstico y me recomendó ir a Colombia no perdí tiempo y me fui, fue tremendo pude salir y eso cuenta, (lagrimas) lo importante es que no estuve solo, ahí aprendí  a interesarme por otras personas, vi la triste realidad de nuestro país con máquinas malas, toda la gente que desgraciadamente muere a diario»

«Lo importante es que Dios me tiene con vida, hay que ser realista, fueron pocos los que estuvieron conmigo, de Olimpia no estuvo nadie, tampoco tenían que hacerlo , ellos me dieron mucho , no me deben nada y tampoco les debo» Puntualizó Espinoza .