El club del Ejército ruso (CSKA) cumple 100 años en plena guerra con el COI

El equipo del Ejército ruso, el legendario CSKA, cumple este 29 de abril cien años en plena guerra con el Comité Olímpico Internacional (COI), que ha decidido excluir a todos los deportistas que pertenezcan a dicho club debido a su vinculación con las Fuerzas Armadas que combaten en Ucrania.

«El CSKA fue, es y seguramente seguirá siendo el buque insignia del deporte en este país. Me da rabia por los deportistas que no pueden aprovechar a lo mejor su única oportunidad de competir en la arena internacional», comentó a EFE Serguéi Tarakánov, que militó en el CSKA de baloncesto entre 1979 y 1990.

EL Сlub Central de Deportes del Ejército (CSKA), que nació con un partido de fútbol entre deportistas-militares disputado en Moscú el 29 de abril de 1923, ha producido a lo largo de este siglo miles de campeones mundiales y europeos, y cientos de campeones olímpicos, pese a que la antigua URSS no comenzó a competir en los Juegos hasta 1952.

Además, los atletas soviéticos y rusos se perdieron por el boicot político Los Ángeles 84 y, debido al dopaje de Estado, muchos de ellos tampoco participaron en las últimas dos olimpiadas (Rio y Tokio).

PUTIN RESPALDA AL CSKA

El presidente ruso, Vladímir Putin, un gran aficionado al judo y a los deportes de invierno, ha defendido desde un principio el honor del CSKA y ha acusado a Occidente de politizar el deporte.

«Hoy honramos a los jugadores del CSKA de todas las generaciones, a aquellos que dedicaron su vida profesional a su querido club», señala su telegrama de felicitación.

Recordó que el CSKA no sólo fomentó el desarrollo del deporte a nivel nacional, sino que también contribuyó a los triunfos de los atletas soviéticos y rusos en Europeos, Mundiales y Juegos Olímpicos en disciplinas como «el baloncesto, el atletismo, el patinaje, la lucha y muchos otros deportes».

Por decisión de Putin y del ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, representantes del club y leyendas del CSKA fueron condecorados esta semana con órdenes y medallas estatales.

«Fuerzas destructivas intentan excluir a Rusia de todas las federaciones deportivas internacionales», denunció Shoigú hoy al reunirse con el coronel brasileño Rolim Gomes, presidente del Consejo Internacional de Deporte Militar (CISM).

En total, el CSKA, que también cuenta con equipos de voleibol, fútbol y balonmano, compite en 41 disciplinas olímpicas, 30 de verano y 11 de invierno.

MÁS QUE UN CLUB

El presidente del Comité Olímpico Ruso (COR), Stanislav Pozdniakov, muy crítico con los criterios impuestos por el COI, que considera una «farsa», se sumó a la defensa a ultranza del club.

«Para mí el CSKA es la organización deportiva, el club más fuerte que haya existido jamás, al menos en esgrima», señaló el campeón olímpico y mundial en las filas de dicho club.

Se mostró convencido de que «estos tiempos turbulentos pasarán», por lo que llamó a los atletas del CSKA a estar preparados «para que de nuevo los rojos y azules sean los más fuertes».

Al respecto, Tarakánov recuerda que el CSKA siempre fue «una especie de selección nacional, ya en cualquier disciplina deportiva siempre jugaron los mejores».

«Sólo en fútbol iba rezagado. El lema era: ‘Solo por la victoria’. Cada derrota era recibida como una catástrofe», explica.

AL BORDE DE LA EXCLUSIÓN

Sea como sea, Ucrania -que acusa a Rusia de violar la tregua olímpica en 2008 (Georgia), 2014 y 2022 (ambas en Ucrania)- y Occidente lo tienen claro, los deportistas del CSKA no pueden competir internacionalmente, ni siquiera como neutrales, hasta que concluya la conocida como «operación militar especial» en Ucrania.

Recuerdan que los integrantes del club militar sumaron 45 de las 71 medallas de Rusia en los últimos Juegos Olímpicos de Tokio.

El COI tomó nota y prohibió expresamente la participación de todos los miembros del CSKA y de las fuerzas de seguridad.

«Sí, el Ejército patrocina el club. Y sí es verdad que todos tenemos rango militar. Pero, en realidad, no somos auténticos oficiales, es algo nominal. En la época soviética éramos una casta privilegiada, eso es todo», argumenta Tarakánov.

El baloncestista, que terminó su carrera como capitán, cree que hay «lógica» en las sanciones que exige Occidente, pero está en contra de la exclusión, más aún teniendo en cuenta que la carrera de un deportista «es tan corta».

«Estoy a favor de que nuestros chicos, pese a las sanciones, participen en los Juegos Olímpicos y en otras competiciones si es posible», aseveró.

En la misma línea, la comisión de deportistas del COR rompió una lanza en favor del CSKA al condenar la discriminación de un deportista por el hecho de que pertenezca a una «estructura» en concreto.

«Bajo nuestro punto de vista, se crea un peligroso precedente, según el cual ni un solo deportista en el mundo puede estar seguro de que en un futuro se respetarán como es debido sus derechos civiles», afirmaron. EFE