A 30 años del último título de Maradona con la Selección Argentina

Mar del Plata. 24 de febrero de 1993. Hace 30 años Diego Armando Maradona daba la última vuelta olímpica con la camiseta de la Selección argentina.

El 10 levantó la Copa Artemio Franchi, que también sirvió para celebrar los 100 años de la creación de la Argentine Association Football League, la precursora de la AFA.

Fue un partido especial, sin dudas, porque marcaba el regreso de Diego luego de una larga ausencia. Es cierto que unos días antes había jugado un amistoso ante Brasil, pero esta Copa marcó la vuelta oficial luego del caso de dóping que lo marginó por un largo tiempo de las canchas de fútbol.

Luego de este choque volvería a estar ausente por un tiempo vistiendo la celeste y blanca, hasta que el 5 a 0 ante Colombia por las Eliminatorias para el Mundial de Estados Unidos 1994 lo hicieron volver, en aquellos encuentros de repechaje contra Australia.

El partido enfrentó a la Argentina, campeona de la Copa América de 1991, contra Dinamarca, campeón de la Eurocopa de 1992.

La Argentina dirigida por Alfio Basile formó con: Sergio Goycochea; Néstor Craviotto, Jorge Borelli, Sergio Vázquez, Ricardo Altamirano; Diego Simeone, Alejandro Mancuso, Diego Maradona y Leonardo Rodríguez; Claudio Caniggia y Gabriel Batistuta.

Dinamarca lo hizo con: Peter Schmeichel; Marc Rieper, Plechnik (Brian Nielsen), Lars Olsen y Henrik Larsen; Kim Vilfort, Kjeldjerg, Jan Mølby, Lars Elstrup; Bjarne Goldbæk y Michael Laudrup. El entrenador fue Richard Nielsen.

El partido fue parejo, y Dinamarca se puso en ventaja de entrada con un gol en contra de Néstor Craviotto a los 12 minutos. Sin embargo, a los 30, Caniggia anotó el empate final tras un remate desviado del Bati que el Cani transformó en gol.

La definición fue por penales. Y con Goyco en el arco la Argentina contaba con ventaja. El arquero surgido de River ya había demostrado y con creces en el Mundial del ’90 que era un especialista desde los tiros de los 12 pasos.

En las definiciones ante Yugoslavia e Italia se convirtió en la gran figura, en el jugador decisivo para que la Argentina pasara de ronda. En esta caso no falló: le contuvo los penales a Kim Vilfort y a Bjarne Goldbæk para darle la victoria a la albiceleste por 5 a 4. Para la Argentina había fallado Caniggia.

Dinamarca contaba con figuras como Peter Schmeichel y Brian Laudrup, el hermano de Michael, quien se había retirado de la Selección un tiempo antes.

Por su parte, Maradona se había «escapado» de Sevilla para jugar este partido, y había dejado a su equipo antes de los octavos de final de la Copa del Rey ante Valencia. Esto generó malestar en el conjunto andaluz y una fuerte sanción económica para el 10, que luego se alejaría de la institución.

Esa Selección del Coco, que sufrió y mucho para llegar al Mundial, tenía jugadores de lujo. Como puede repasarse en la formación, el ataque lo formaban Maradona, Caniggia y Batistuta. La misma delantera que jugaría el Mundial de Estados Unidos un año más tarde, sumando a Balbo.

Maradona disfrutó nuevamente con la Selección, su gran amor, este título, el último, recibiendo la Copa como capitán del equipo. El José María Minella lo ovacionó, sin saber que sería la última vez que Diego iba a festejar una conquista con la celeste y blanca en su pecho. (ESPNDEPORTES)