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Falleció leyenda del baloncesto nacional, José Francisco «Chino» López

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El deporte hondureño sigue de luto, esta noche falleció el destacadísimo jugador y entrenador, José Francisco «Chino» López, quien sufrió de la terrible pandemia de la Covid-19 durante las últimas semanas en donde además perdió la vida su hijo mayor Gerardo López.

Al «Chino» le sobreviven sus hijas Lourdes Elizabeth y Suyapa López Benavidez, además de José  Luis López, quien le siguió los pasos y ganó muchos campeonatos con su progenitor como entrenador, recuerdos que quedarán para toda la vida.

López fue un extraordinario jugador de baloncesto del Instituto Central Vicente Cáceres (ICEVIC) en las famosas épocas de los torneos colegiales con el Instituto Salesiano San Miguel en donde mostró sus gran habilidad para hacer puntos de corta y larga distancia y luego también destacó a nivel de al Liga Nathanael López Fuentes.

«Fue un extraordinario jugador, jugamos juntos en el Central del 64 al 67  y luego lo entrené, era un tremendo basquetbolistas e incluso jugamos juntos en los Ases del Guanacaste, primer campeón juvenil. Después se convirtió en un gran entrenador que compartimos finales, algunas las ganó el y otras su servidor. Que tristeza, se ha ido un grande del baloncesto nacional·, dijo su recordado amigo Mario «Pelusa» Argeñal.

En Liga Mayor jugó para Loarque, Honduras  de Nicolás Simón y Olimpia con Mauro Fúnez, pero también en la Liga Bancaria donde fue figura representando el Banco Centroamericano, pero paralelamente ya entrenaba y triunfaba con los equipos del Instituto Central Vicente Cáceres, donde lo hizo eterno campeón hasta que se retiró, entrenándolos en la cancha del Obelisco.

«Hay grandes logros del Chino que nadie sabe, fue el único entrenador que campeonizó en 1993 con una selección juvenil masculina en un centroamericano realizado en San Salvador, con grandes jugadores, como sus hijos Gerardo y José Luis López, los hermanos Luis y Juan Morán, Arlo Santos, Juan Francisco Reyes, entre otros. Ese es parte de su legado, fueron más de 35 años entrenando jóvenes y prácticamente manteniendo vivo el baloncesto», reaccionó triste Martín «Pollo» Zelaya, quien fue una persona muy cercana al recordado entrenador.

Durante 35 años trabajando con el Icevic en todas las categorías, recibiendo luego el apoyo del empresario Rubén Cuéllar Santos, con quien  ganaron varios campeonatos de LNB,  sacando grandes jugadores y dejando un legado difícil de llenar porque después de hacer su trabajo en la banca salía del mismo para preparar a los jóvenes talentos, ya que vivía plenamente el deporte de las cestas.

 

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