
El entrenador de Real España, Ramón “Primi” Maradiaga, reaccionó molesto con la Policía Nacional por una requisa realizada previo al juego del miércoles contra Olimpia.
Ocurrió al momento de la llegada a la Máquina al Estadio Nacional, donde un oficial les solicitó a los jugadores abrir sus bolsos y mochilas para verificar el contenido.
Al enterarse de la situación el director técnico pidió a sus futbolistas hacer caso omiso a las instrucciones del policía, a quien increpó por considerar la medida como un atropello.
La situación no pasó a más y la delegación de Real España se instaló posteriormente con total normalidad en el camerino visitante, para disputar el partido que perderían 3-1 contra los Merengues.
Resulta preciso señalar que Olimpia recibió el mismo trato por parte de los elementos policiales, ya que se llegó a especular que todo podría haber sido parte de la “guerra psicológica” que suele darse antes del algunos partidos, pero este no fue el caso.
Vídeo 1 (Cortesía SB Deportes)
Vídeo 2 (Cortesía SB Deportes)
