Intensa actividad del "mercado negro" en el Honduras-El Salvador

Como suele pasar en los eventos de gran convocatoria de público, el «mercado negro» se dedica a revender entradas para evitar hacer fila.
Al grito de «10 (lempiras) más y no hace cola», los especialistas de la reventa invitan a los aficionados a comprarles entradas para el partido de su predilección.
Y el de Honduras-El Salvador no es la excepción, debido a la expectativa generada porque tras los noventa minutos al menos una de las dos selecciones quedará virtualmente eliminada.
Desde tempranas horas los revendedores comenzaron a ofrecer su «producto», en las inmediaciones de la avenida Circunvalación y del Estadio Olímpico.
Si bien se espera que el estadio esté como mínimo a la mitad de su capacidad, el marcado negro podría acabar haciendo un mal negocio porque el empate 2-2 del viernes ante los cuscatlecos dejó sembrado un ambiente pesimismo, el cual se ha reflejado en la venta de entradas.