LA HUMILDAD DE UN ENTRENADOR

Rodolfo HERRERA
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No importa la forma y cómo se jugó el último partido de la final del torneo de Apertura 2015, lo que cuenta para historia es que un entrenador humilde, con un equipo de conjunto y sin estrellas consiguió lo que todo adiestrador desea.
Nos queremos referir al técnico campeón Héctor Castellón, un profesional formado en México y que siempre ha mantenido una buena conducta, sencillez y humildad que ahora lo tienen en la cima del fútbol hondureño.
Castellón siempre ha estado luchando con equipos denominados chicos y los ha llevado a pelear títulos, primero fue con la Real Sociedad, con el cual fue subcampeón y eso es un mérito para una persona que no le tiene miedo al fracaso, porque también de eso se aprende.
Se dice que al buen técnico lo hacen los jugadores y hasta cierto punto es real, porque algunos equipos logran sus objetivos con planteles de futbolistas con amplia trayectoria y capacidad, sin embargo ser campeón con un cuadro conformado por jugadores de bajo perfil tiene peso, la mano del adiestrador.
En ese sentido somos del criterio que Castellón es un entrenador que conquistó la copa con Honduras Progreso por su estilo de trabajo y criterio profesional para dirigir con mucha capacidad.