Mi Tribuna: llegó el heredero

Por: Jacobo Goldstein
Llevamos años lamentando la caída estrepitosa de Tiger Woods, que de haber sido el gigante de los últimos 20 años, había visto caer su juego a grado tal que duele verlo jugar. Su gran carrera en las canchas hoy es apenas un recuerdo de lo grandiosa que fue durante tantos años y del lamentable estado en que se encuentra hoy en día.
Pero cuando el golf sufría tanto por el bajón del Tigre, la divina providencia ha aparecido de un de repente trayendo a la palestra a un nuevo atleta para sacar de su amargura a ese popular deporte y para hacer que el golf nuevamente pueda brillar con luz propia.
Se trata de la comparecencia en los torneos del joven tejano, Jordan Spieth, que el 27 de julio cumplió apenas 22 años de edad. Este definitivamente ha sido el año de Jordan, pues por gran margen gano en abril el Torneo Masters (el más famoso de todos) y luego salió triunfante en el Clásico John Deere para inmediatamente después coronarse campeón del Torneo Abierto de Golf de los EE UU, seguido por un notable segundo lugar en el Abierto de Golf de Gran Bretaña, donde perdió por un solo golpe de diferencia. Una racha así no se veía desde la época de oro del Tigre de las Canchas, cuando verdaderamente el señor Woods reinaba con la fuerza de un león y la agilidad de una gacela.
Pero lo que ha hecho este año Jordan Spieth, le da una nueva dimensión a ese deporte y nos presenta una figura que todos podemos admirar y respetar. Ojalá que Jordan Spieth siga enrachado y que termine siendo el legítimo heredero de la corona que por tantos años fue propiedad exclusiva de «El Tigre», antes de que el dejara de ser El Rey de la Selva.