Platini, ¿candidato providencial a la FIFA o producto del sistema?

Michel Platini es el gran favorito a la elección presidencial de la FIFA, el próximo 26 de febrero de 2016, pese a las voces que se han alzado para intentar descalificarle y describirle como un producto de un sistema agonizante.
Platini, «un producto del sistema».
Es el principal argumento de sus rivales potenciales para tratar de torpedear su candidatura, una vez hizo oficial el miércoles que concurrirá a las elecciones de la FIFA.
Un rival de peso se ha aferrado a este discurso este mismo jueves. El surcoreano Chung Mong-joon, exvicepresidente de la FIFA y personaje fundamental del fútbol asiático, reveló a la AFP su intención de presidir la federación internacional y aprovechó para tildar a Platini de «producto del actual sistema FIFA», además de «un protegido de (Joseph) Blatter».
Platini, que comenzó su carrera de dirigente bajo la protección de Blatter, se ha convertido en el más crítico opositor al actual presidente tras la multiplicación de casos de corrupción.
Si decidiese ir hasta el final, el multimillonario surcoreano, de 54 años y heredero del imperio industrial Hyundai, se convertiría en el rival más duro de Platini.
Las palabras más duras contra Platini llegaron el mismo miércoles del príncipe jordano Ali bin Al-Hussein, candidato derrotado por Blatter en las últimas elecciones, al que se enfrentó con el apoyo de… Platini y de la UEFA.
«Platini no es bueno para la FIFA (…) La cultura de los acuerdos en los pasillos, bajo cuerda, debe llegar a su fin», denunció el príncipe jordano, que no precisó si volverá a presentarse a las elecciones.
Candidato declarado, el presidente de la Federación de Libia, Musa Bility, también cargó contra Platini: «No representa el cambio, ha sido vicepresidente de la FIFA durante 8 años. No debe suceder a Blatter. Sería inaceptable».
¿Qué consecuencias en número de votos?
A priori ninguna, o casi. Chung, Bility y Ali podrían incluso formar un frente común contra el francés, pero Platini se ha asegurado contar con buenos apoyos antes de anunciar su candidatura.
Si el ganador de tres Balón de Oro no se presentó contra Blatter hace dos meses era porque no tenia seguro el triunfo. Si ahora da el paso es porque tiene la seguridad de ganar los comicios.
De hecho, solo unas horas después de los ataques de Chung, la Confederación Asiática (AFC) confirmó oficialmente su apoyo a Platini, desautorizando al surcoreano.
«Es, sin ninguna duda, un excepcional candidato que traerá estabilidad y permitirá una transición sin problemas para llevar a un funcionamiento normal a la FIFA, en esta difícil solución», estimó en un comunicado el presidente de la AFC, el jeque Salman Bin Ibrahim Al Khalifa, quien llamó a sus 47 federaciones a «permanecer unidas detrás del mejor candidato».
Platini dispone así del apoyo de cuatro de las seis confederaciones: Europa, Asia, Sudamérica y Concacaf. Eso le asegura un buen colchón de votos de las 209 miembros de la FIFA.
¿Qué reformas a afrontar?
El exnúmero 10 de la selección francesa aún no ha desvelado su programa, pero sin duda hará valer su perfil de reformista, como lo ha hecho desde que preside la UEFA (2007): fair-play financiero, apertura de la Liga de Campeones, Eurocopa de 24 equipos, etc.
Un balance que lleva a sus partidarios a presentarle como un hombre de ruptura en momentos en los que la institución está siendo investigada por los procesos de atribución de los Mundiales de Rusia-2018 y Catar-2022.
«Es verdaderamente una de las personas del mundo futbolístico actual más aptas para ejercer la función de presidente de la FIFA y devolver a esta última la credibilidad necesaria tras los acontecimientos de Zúrich de estas últimas semanas», indicó a la AFP el exsecretario general del organismo, el suizo Zen Ruffinen.
«Es un dirigente preparado y capaz de llevar a cabo las reformas necesarias para refundar el organismo futbolístico mundial», escribió por su parte el presidente de la Federación Italiana de Fútbol (FIGC), Carlo Tavecchio.
Platini, en su carta de oficialización de la candidatura, insistió en la necesidad de «reformar» la FIFA.