SIGUE LA BOLA

Los “angelitos” de las mal llamadas barras bravas Ultrafiel y Revos, anduvieron felices como lombrices, codeándose con las meras… meras de Casa Presidencial, y hasta “piquitos” se dieron con el Presidente, ministros, pastores y uno que otro de la “ropa tendida”.
Juraron (por enésima vez) hasta por la “madrecita que los parió”, que ya no habrá “cachimbeadas”, desgorres y mucho menos “mentadas de madre… ¡cómo no chón! Si cada vez que hay un clásico son varios los heridos y “palmados”.
En esa reunión parecían más santos que la “Madre Teresa de Calcuta”, y uno de la “ropa tendida”, casi al borde del llanto de la emoción que lo embargó al ver tal “magno evento”, iba a mocionar para que le les entregaran la “Gran Cruz del Desgorre”.
Habrase visto tal desfachatez y vergüenza nacional que un grupo de vagos, pendencieros, malandrines y relajeros se reunieran con el Presidente, como si este no tuviera cosas más importantes que hacer.
Pidieron además que en las zonas del estadio en donde se dedican a hacer unas cosas tan feas (¿?) que aquí no me atrevo a mencionar, ya nos les vendan “brutas” (cervezas), ya que cuando andan bien trabados (locos), se les olvidan todos los falsos acuerdos de paz.
Hablando de “brutas”, me ha llamado la atención un informe del IHADFA, que indica que para esta Semana Santa los hondureñitos se “chuparán” nada menos y nada más que 88 millones de octavos del vulgar “guaro”, aparte también ingerirán 120 millones de botellas de “brutas”.
Y es que en Honduras solo se puede vivir de dos maneras: “bolo o enculado”, bien a “bomba” uno no siente los trancazos, y enamorado todo es color de rosa, viendo corazoncitos y querubines por todos lados, aunque la doña lo pase “marimbeando”.
Y es que para Semana Santa que se supone es de reflexión y redención, familias completas de esas que están “mamando” con el gobierno, comiendo los tres tiempos y con manteca, van despupusadas… hacia esas jucas playas del sur y otras del norte.
No llevan una tan sola Biblia, pero si hieleras repletas de “brutas”, “churros”, latas de sardina, sopas de vaso, mochilas llenas de tangas, hilos dentales, camisetas mojadas, nada de “brasieres” y chancletas de vieja “bruja”.
Y es que “en el mar, la vida es más sabrosa; en el mar todo es felicidad…” en casita se quedan, con el perro pulgoso, y en las procesiones, los que están en la vil llanura, los “come salteado” o “come cuando hay”… y los que perdieron la elecciones.
LA PREGUNTA DEL CINQUITO ¿Y ya escucharon los “criticones” el nuevo “éxito” de “Polache”, que lleva por título “Me pela el eje”?