Inolvidable gol de Pedro Colón…

Por: Geovanni Gómez
@geovannygo
 Justamente hoy 25 de abril, se cumplen 47 años de aquel gol que significó para el Motagua su segundo campeonato de Liga ante su enconado rival, ya que en 1968 también los “azules” se coronaron campeones en un juego de campeonato ante el Olimpia, equipo con que siempre han tenido una férrea rivalidad de décadas.
El gol de Pedro Colón es algo inolvidable tanto para los seguidores viejos y jóvenes  (aunque no lo vieron), porque lo destacan como uno de los hechos históricos más importantes del Fútbol Club Motagua, tomando en cuenta la forma emotiva con que ingresó  la bola al pórtico que defendió Roberto Crisanto “Manga” Norales y lo que significó un título de los más celebrados en la historia de los “mimados”.

LA PRIMERA “FINAL”
En sí ese 24 de abril de 1971 se jugaba un partido extra calendario para sacar al campeón nacional, ya que en las tres vueltas regulares del Torneo 1970-1971, luego de 27 jornadas quedaron empatados con 37 puntos.
El Motagua  ganó 13 empató 11 y solamente perdió tres y tuvo una diferencia de goles de + 25 (43-18), mientras Olimpia ganó 16 empató cinco y perdió seis, su diferencia de goles fue de + 24 (43-19). En ese tiempo los ganes eran validados con dos puntos y no tres como ahora.
El reglamento contemplaba juego extra para definir al campeón y si se mantenía la paridad se iban a la diferencia de goles de todo el torneo, lo que favorecía por uno al Motagua.
Es así que la Liga Nacional decide programar el partido de desempate (algunos llaman gran final) para el domingo 25 de abril de 1971, donde los árbitros nombrados para dicho duelo en el estadio Nacional de Tegucigalpa fueron Roberto Morales, José Raúl Carranza (padre de Marcio Carranza) y Carlos Morales.
Al partido llegaron 16 mil 680 aficionados, abarrotando totalmente el estadio Nacional y dejando una recaudación record de 40 mil 223 lempiras, más de 20 mil dólares.
Fue un partido vibrante y de mucho nervio que puso a temblar a los “azules” luego del golazo anotado por el zurdo Jorge Bran, adornado por el vuelo angelical del portero nicaragüense Salvador Dubois, lo que provocaba la alegría de los merengues y de su joven entrenador Chelato Uclés, pero el “Zorro” Carlos Padilla Velásquez se jugaba una gran carta, sin ser un jugador extraordinario, pero si veloz y ágil, hace ingresar a Pedro Colón a petición de la afición encabezada por el recordado dirigente Enrique Miselem. El cambio surtió efecto aunque Colón inicialmente falló una clara, pero en la que aprovechó le pegó mal al balón, le hizo un pique a “Manga” Norales y la bola ingresó en el pórtico albo. Fue una anotación dolorosa  en el lado olimpista, pero lo contrario sucedió con la algarabía azul de parte de sus dirigentes Pedro Atala Simón, doña Argentina de Bulnes, Mario Rivera López, Daniel Matamoros Carrasco, Marco Tulio Gutiérrez, Manolo Giraldez, Juan de Dios Vides, Pío Voto, Enrique Miselem y toda la dirigencia del cuadro mimado de la época.
Jugadores y cuerpo técnico junto a sus dirigentes lo celebraron por todo lo alto habían ganado el campeonato ante un gran rival, un Olimpia lleno de estrellas, base de la Selección Nacional.
Motagua ese domingo histórico alineó a Salvador Dubois, Nelson Benavidez, Julio Meza, Luis Cruz, Arnaldo “Chuluyo” Zelaya, Linauro Di Paula, Rubén Guifarro, Oscar “Martillo” Hernández, Hernán Godoy (Pedro Colón), Pedro Caetano Da Silva, Mario Blandón Artica y Tomás Máximo.
Los albos por su parte jugaron con Roberto Crisanto Norales, Selvin Cárcamo, Miguel “Shinola” Matamoros, “Juanín” Lanza, Manuel “Candado” Williams, Ventura “Gata” López, Ramón “Mon” Paz, Marco “Tonín” Mendoza, Rigoberto “Shula” Gómez, Donaldo “Coyoles” Rosales, Reinaldo Mejía, Jorge “Indio” Urquía y Jorge Bran.