HONRANDO A MARIANO

Por: Jacobo Goldstein

Los Yankees de Nueva York son el equipo más famoso en la historia del béisbol de grandes ligas, el equipo que más series mundiales ha ganado y la escuadra que ha contado con una serie de superastros que honraron con su desempeño en la cancha y fuera de ella al béisbol profesional de los EE UU.

Varios de los gigantes de las ligas mayores han vestido el uniforme gris con rayas de los Bombarderos del Bronx, al que defendieron con hidalguía y con su enorme capacidad y habilidad en el terreno de juego. Entre esas figuras estelares podemos mencionar a cuatro que ya fallecieron y están en el Salón de la Fama, cuyos nombres son Babe Ruth, Lou Gehrig, Joe DiMaggio y Mickey Mantle.

A esos titanes de la pelota y del bate agreguemos el nombre de un hombre nacido en Panamá hace 46 años, que durante 19 temporadas, de 1995 al 2013, lanzando para los Yankees, ya ingresó a las páginas de la historia como el mejor relevista de nuestros tiempos y quizá el mejor cerrador o tapón de todos los tiempos.

Mariano Rivera fue nombrado al Equipo de Estrellas de la Liga Americana en 13 ocasiones y durante su carrera tuvo un promedio de carreras limpias permitidas de 2.21 cada 9 entradas. Ganó cinco de las siete series mundiales en que participó y su promedio de carreras permitidas fue de 0.99. Ambas cifras son extraordinarias.

También protegió la ventaja de los Yankees en 652 partidos de temporada y en 42 partidos de eliminatorias y series mundiales. El será elegible para ingresar al Salón de la Fama en el 2019 y se da por descontado que será escogido en la primera ronda.

Su equipo lo honró con una placa develada el 14 de agosto en el estadio de los Yankees. Compañeros de él estuvieron a su lado, en lo cosechó aplausos a granel de una afición, que sabe que difícilmente encontrará otro relevista de su talla y su pundonor, cuyo amor a los Yankees es eterno.