Fallece la gran dama del béisbol de Honduras

El deporte hondureño vuelve a vestirse del luto por el fallecimiento de una sus grandes baluartes deportivos, una dama que en su época fue una verdadera quijote del deporte, formando y forjando grandes generaciones de beisbolistas a través de las novenas menores de los clubes Cohbana y Tropical, en una época donde el béisbol menor vivía sus mejores momentos.

Y es que doña Consuelo Ramona Sauceda Fiallos viuda de Barrientos en vida justificó con hechos su gran esfuerzo al apoyar a los niños que llegaban ilusionados al campo de béisbol de la colonia Kennedy (Samuel da Costa Gómez o Aseguradora Hondureña) donde aprendieron los primeros pasos para ser grandes peloteros y buenas personas.

A los 90 años doña “Chelo” ha partido al cielo junto su esposo, don Fausto y su hermano, el gran ex pelotero de Olimpia, Natividad Álvarez, dejando grandes legados que en su momento se recordó en Onda Deportiva de La Tribuna.

Su pasión fue ayudar a los niños, una dirigente a carta cabal.

Doña “Chelo” en algún instante de su vida reconoció que al inicio el béisbol no era su gran pasión, sino el fútbol, ya que inicialmente iba a ver a su hermano al campo La Isla, cuando era futbolista del Federal y Argentina. Pero con el paso del tiempo se inclinó al béisbol al ver a su hermano en el Olimpia, pero influye más ver a sus hijos en la Escuela Centroamérica, donde iniciaron su paso por el rey de los deportes.

Su incursión definitiva en el béisbol fue junto a su compadre Héctor “Shoshy” Sosa al llevar a sus muchachos al Olimpita, pero por la falta de apoyo el proyecto solamente duró un año, luego el recordado dirigente deportivo, Rodolfo Álvarez Baca le consigue el patrocinio de Cobhana, pero dura poco, por lo que la Cervecería Hondureña le abre las puertas de un patrocinio, ya su equipo se denominó en ese tiempo, Tropical, donde lograron campeonatos locales y nacionales. Las primeras categorías formadas fueron la pre infantil, infantil menor y mayor. Sus primeros managers fueron sus propios hijos: Javier, Sigfrido, Omar, David, Douglas y José”, agregó.

En la liga menor Horacio “Chito” Reina, doña Consuelo fue una madre para todos los cipotes del béisbol, especialmente los de Tropical.

Una satisfacción importante en su vida fue ver como sus hijos se involucraron de lleno en el béisbol, ya que jugaron todos menos Omar, pero éste se convirtió en gran manager de la Organización Gigantes donde ha mostrado su gran categoría.

Doña Chelo rindió la jornada de la vida, pero en su momento tuvo el honor de departir con otras grandes damas del béisbol como Marina de Valladares, Ada de Borjas, Ruth de Padilla, Rosa Godoy, Bessy de Morazán, entre otras.

Sus restos mortales están siendo velados en la funeraria San Miguel Arcángel de la colonia Kennedy de Tegucigala y su funeral será en el cementerio San Cruz Memorial.

Con su adorado esposo don Fausto, siempre le apoyó en la quijotada como dirigente del béisbol menor.