El mensaje que están dando los aficionados

Créalo o no, pero en un partido de fútbol en La Ceiba, en donde estaba involucrado el líder del torneo, solo llegaron 160 aficionados, el partido en el estadio Ceibeño entre Victoria y Honduras Progreso mostró una vez más que la clientela del balompié catracho va en descenso. El total recaudado 16,100 lempiras no ajustó ni para el agua.
Qué motivación van a tener los jugadores de ambos equipos al ver un estadio completamente vacío, o lo propios dirigentes del Victoria, que mes a mes tienen que cumplir con la planilla. Creo que hay que hacer un análisis del mensaje que están enviando los aficionados que antes llenaban los estadios y ahora no.
Lo paradójico de todo esto es que hace unos años el estadio Ceibeño fue ampliado, sí… se le construyó otra gradería, pero para qué si cada vez que juegan Victoria y Vida, el panorama es el mismo, desolador.
Ya en Honduras no es noticia que los partidos de nuestra Liga se jueguen a estadios vacíos, no importa si son clásicos o derbis, lo que más me preocupa de esto es que a nadie parece no preocuparle o interesarle, se sigue jugando igual, no hay promociones ni motivaciones para hacer volver a la gente.
Falta de espectáculo, crisis económica, inseguridad, horarios no aptos, pleito de barras, falta de transporte, etc., habrá muchas excusas, algunas valederas otras no, de las razones del porqué los aficionados hondureños ya no quieren asistir a los estadios.
El partido del sábado en La Ceiba, hace ver al Victoria como el equipo con menos aficionados en el mundo, hasta en las canchas en donde se juega fútbol burocrático llegan más personas de las que habían esa fecha en el estadio Ceibeño.