LA DECISIÓN CORRECTA

Hay que aplaudir la decisión de Eddy Hernández, quien recientemente se incorporó a Motagua, al no encontrar equipo en el extranjero, prefiere quedarse en el país y estar más cerca de nuestro fútbol y de la selección nacional.
Hernández, jugador joven con mucho futuro, no tuvo problemas en acomodarse al presupuesto de Motagua y no quedarse en el “aire” o viajar a un lejano país a jugar en un equipo de segunda o tercera división, ganando buen billete, pero sin oportunidades de seguimiento para la selección nacional.
Tampoco puedo criticar la decisión personal de aquel o este jugador de irse al extranjero y ganar mejor que en Honduras, cuestión de lógica entendible, pero a veces es mejor sacrificar poco al principio para ganar mucho al final.
Otros futbolistas no siguieron el ejemplo de Eddy y se fueron a países en donde no son de tradición futbolística, muy, pero muy lejos de su familia, de las costumbres catrachas, de las barreras por el idioma, y al final como suele suceder generalmente, al cabo de una temporada regresan para preparar otra aventura en las afueras del país sin pena ni gloria.
Ahora el sueño de todo jugador de fútbol es jugar en el extranjero, uno les pregunta y ellos responden eso, y es de alabar que tengan ese anhelo, sin embargo ese sueño en muy contados casos termina en pesadilla.
Ya lo dijo el seleccionador nacional Jorge Luis Pinto a los dirigentes y a los mismos futbolistas, que estos trascienden a la fama no por lo que hacen en sus equipos sino por lo que muestran en la selección, y de lo que dice el estratega colombiano, en Honduras hay varios casos que no hace falta mencionar.
Por: Marcial TORRES XATRUCH
@marcialxatruch
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