VÍDEO.- (Protagonista): Un Messi estelar aparece para desempatar el duelo de arqueros alemanes

La versión más estelar de Leo Messi apareció en el Camp Nou para desempatar el duelo de arqueros que disputaron el azulgrana Marc-André Ter Stegen y Manuel Neuer que, a pesar de brillar en el primer tiempo con dos brillantes paradas, no pudo frenar la magia del argentino en el último cuarto de hora.

Hasta hace pocos meses la única experiencia en una competición europea de clubes del guardameta azulgrana se limitaba a los siete partidos de la Liga Europa que en la temporada 2012-13 disputó defendiendo los colores del Borussia Moncengladbach.

Recibió un total de once goles, los cinco últimos en la eliminatoria de dieciseisavos de final que convirtió la Lazio de Roma para lograr el pase a la siguiente ronda. Dos años después, el joven guardameta alemán, suplente de Claudio Bravo en la Liga española, es el guardián del Barcelona en la Liga de Campeones que este miércoles ante el Bayern de Múnich (3-0) completó la ascensión al penúltimo peldaño antes de la final que se disputará en Berlín el próximo 6 de junio.

Ter Stegen se volvía a cruzar con el Bayern de Manuel Neuer, su ídolo, el líder de la nueva generación de arqueros que abundan en el fútbol alemán y «el mejor guardameta del mundo», aseguró en el día de su presentación como nuevo jugador azulgrana.

Esta vez no era un encuentro más de la Bundesliga, tampoco de Copa Alemana, cuando hace tres años no pudo evitar que su exequipo quedara eliminado por los bávaros en la tanda de penaltis de la semifinal de la competición copera.

En esta ocasión el escenario era el Camp Nou, lejos de su Alemania natal, en un partido de aúpa para un guardameta que a sus 23 años demuestra, partido tras partido, que la maldición que perseguía la portería azulgrana antes de la llegada de Víctor Valdés ya es historia, incluso en la mente de los aficionados azulgrana más supersticiosos.»Me dijeron que en el Barça había una presión inmensa y no la noto», aseguraba hace pocos meses en una entrevista.

La presión este miércoles la imprimió el Bayern. Planteó Guardiola un engranaje casi perfecto para tapar la salida del balón de los centrales azulgranas, por lo que el meta teutón tuvo que optar por los desplazamientos en largo, sobre todo en el primer tiempo.

Acostumbrado a abrir el juego al más puro estilo de los líberos que campaban en la época de Franz Beckenbauer, Ter Stegen se desesperó en los primeros veinte minutos. No encontraba línea de pase alguna para que Piqué, Mascherano, Busquets o Iniesta iniciaran las posesiones de su equipo.

La solución: jugar a la ruleta rusa con balonazos a los delanteros o abrir el juego a los laterales a través de desplazamientos diagonales. Éste fue su único gran rompecabezas en un partido, en el que sus manoplas no aparecieron debido a que el Bayern creó apenas peligro entre los tres palos.

Mucho más trabajo tuvo Manuel Neuer, que en el primer tiempo demostró porque es el mejor arquero del mundo. Como su compatriota también tuvo trabajo con los pies, pero en su caso para evitar los goles azulgrana.

Salvó el primero en un mano a mano con Luis Suárez (min.11). Aguantó la mirada al uruguayo y, como si de un portero de balonmano se tratara, sacó la pierna derecha para rechazar el balón.

Tampoco necesitó de los guantes para evitar el tanto de Dani Alves antes del descanso. Iniesta dejó solo al brasileño que dentro del área se topó de nuevo con la extremidad derecha del internacional alemán.

En el segundo tiempo el ritmo diabólico se calmó y ambos arqueros gozaron de algo más de tranquilidad hasta que apareció Leo Messi, que en su partido cien en la Liga de Campeones dio la razón a Pep Guardiola cuando en rueda de prensa dijo que ningún sistema defensivo podía parar al astro argentino.

El delantero rosarino anotó dos goles y una asistencia a Neymar en el último cuarto de hora que acercan a la final de Berlín a Ter Stegen, que en once partidos en la élite europea solo ha recibido siete tantos, cuatro menos que su ídolo. EFE