El valor del deporte

En cualquier parte del mundo, el deporte reúne una serie de bondades que contribuyen a la salud física y mental, y con ello el Estado se ahorra una buena cantidad de dinero en atención a la salud.

El deporte no solo es competencia y superación, reto y meta, metáfora de la vida humana, sino que es desarrollo emocional que hace personas de éxito y responsables de sí mismos.

Pero nos preguntamos, ¿por qué en nuestro país el deporte es visto por las autoridades que nos dirigen como algo sin importancia? Y por eso no se interesan por darles recursos para formar campeones y ciudadanos de bien.

Un periodista español escribió que el “deporte es también escuela de caballerosidad, sobriedad y magnanimidad en la victoria; sobriedad y resignación en la derrota. Todo gesto excesivo es antideportivo. Saber ganar es faena más difícil que saber perder. Por eso suele ser más fácil apreciar la dignidad en el gesto del derrotado que en la hosca alegría del vencedor”.

Todo lo anterior se forja en la práctica del deporte, pero cuando ese hábito de entrenar hay que formarlo en los niños y jóvenes, sin embargo en Honduras el incentivo del Estado es mínimo para que una buena porción de la sociedad practique determinada disciplina.

La educación debe ir acompaña del deporte, porque la persona es unidad de cuerpo y mente. En nuestro país se perdió el deporte escolar y apenas hay asomos de rescatarlo, al menos cinco deportes. Si la Secretaría de Educación impulsara en las escuelas y colegios el deporte, en Honduras habría muchos campeones, pero confiamos que se comience a hacer ese trabajo.

@rodolfoherra
Rodolfo Herrera