Fútbol Nacional
La Policía sólo tuvo un error
SAN PEDRO SULA.- Trabajo arduo de muchas horas y fatigante fue el que tuvieron los elementos de la Policía Nacional, el sábado antes, durante y después de la gran final del balompié hondureño, donde Real España se proclamó campeón.
Varios cordones de seguridad en las cercanías de estadio “Francisco Morazán”, en los portones de acceso y en el interior implementaron los más de 300 elementos, que participaron en la seguridad de los jugadores y aficionados.
La labor de los uniformados bajo el mando del director de la Policía Nacional, José Luis Muñoz Licona, se vio empañada por un acto vandálico que pudo convertirse en tragedia que fue protagonizado por los seguidores del Olimpia.
Luego del pitazo inicial del central Benigno Pineda, a los 30 segundos de juego la barra de los capitalinos ubicada en la localidad de sol sur, lanzó un “mortero” al portero de Real España, Marcelo Macías.
El uruguayo quedó tendido en el campo por varios minutos, debido al fuerte estruendo, la vandálica acción hizo que los policías actuaran inmediatamente, poniendo en control a los desenfrenados aficionados.
Los policías se ubicaron junto a los fanáticos albos, restableciendo el orden y vigilando el comportamiento de los miles de ultrafieles, durante el juego.
Afortunadamente al arquero no le pasó nada y el juego trascurrió normalmente.
Fue la única distracción que tuvieron los centinelas en la gran fiesta del balompié catracho, luego estuvieron atentos y poniendo en orden a los aficionados, además utilizaron cámaras de seguridad que estaban en uno de los palcos y varios de los elementos usaron infrarrojos con el fin de no perderle la pista y mantener identificados a los revoltosos en las gradas.